Los campos jamás deberían dejar de florecer

       "-Canta, canta una canción -ordena el superior.

  - No puedo -responde el soldado. 

  - Es una orden, ¿te niegas a cumplir una orden?

  -Es una orden que no puede darme, no figura en los reglamentos. Perdóneme. Para cantar hay que estar contento. Si uno no tiene un corazón contento, nadie te escucha…" 

"Los campos florecerán nuevamente",

película italiana del Director Ermanno Olmi

        Miles, millones de personas han muerto por culpa de las guerras a lo largo de la historia. Y sobre sus cadáveres, o sobre sus tumbas, los campos han vuelto a florecer. Ahora bien, ¿es lícito que ello suceda? ¿Se puede disponer de la vida de la gente, con el solo fin de dirimir diferencias entre los países, que siempre luchan entre sí para obtener réditos o recursos naturales, pero en realidad vienen asesinándose desde que Caín mató a Abel? ¿Es justo? No lo es.
        En noviembre de 1917, esta realidad está más viva que nunca. La Primera Guerra Mundial, conocida como "La Gran Guerra" por aquellas épocas, y que terminaría con la vida de más de 25 millones de europeos, está a pocos metros de terminar. Pero el sufrimiento de estos hombres no termina...
        "Los campos florecerán nuevamente", esta joya del año 2014, y a las que siempre nos tiene acostumbrados el gran Director Ermanno Olmi, lo muestra en toda su crudeza. Es el invierno de 1917 en el frente nordeste, donde hay una base a 1.800 metros de altura, en el altiplano de Asiado. Todo es nieve. No hay más que nieve. Los soldados enemigos están ahí nomás, a pocos pasos. Quizá sufriendo tanto como ellos (dejando de lado la "lógica" de la guerra,ya que el "enemigo" nunca sufre, y si sufre, se lo tiene "merecido"), pero cerca. Demasiado cerca de sus balas...
        Y en medio del dolor, del frío terrorífico, de las llamadas de "los superiores" que ordenan que los soldados abandonen el lugar para desplazarse a otro en medio de la tormenta de nieve y las balas, hay lugar para la humanidad de estos personajes que recrean la memoria del padre de Olmi, quien fue llamado a la guerra cuando tenía 19 años. Un drama que marcó a fuego su juventud, como la de tantos. Y todavía faltaría la Segunda Guerra Mundial. Y tantas otras matanzas...
        Nominado a ocho premios "David di Donatello", el film ganó además el Premio de la Crítica en el Festival Internacional de São Paulo, Brasil.

Duro momento de la vida de estos hombres afrontando la guerra y la soledad

        El elenco dirigido por Olmi representa acabadamente la situación tremenda de estos pobres hombres: Andrea Benetti, Doménico Benetti, Japoco Crovella, Andrea Di María, Francesco Formichetti.
        Mientras veíamos la película, que recomendamos, copiamos este texto que nos llena de emoción, en una carta que un soldado le envía a su madre (que muy bien podríamos ser cualquiera de nosotras...):   

"Mi querida y amadísima madre, la casualidad o tal vez el destino me ha deparado vivir una guerra que imaginaba pero que no conocía. Me encuentro en un destacamento en las alturas. Sólo hay nieve alrededor. Y silencio. La trinchera austríaca está tan cerca que se puede oír su respiración. Llevo aquí poco más de una hora, y de golpe siento que me he vuelto un viejo, tanto que mi estudio y hasta mis ideales han perdido su sentido aquí, igual que mi juventud. Madre amadísima, hay jóvenes como yo que mueren cada día e incuso aquellos que volverán a casa llevarán adentro la muerte que han conocido. Es un sentimiento que jamás los abandonará. Se sentirán sobrevivientes, condenados a morir dos veces. Pero lo más difícil será perdonar.  Si un hombre no sabe perdonar, ¿qué clase de hombre es?".

        Sobre el final, el Capitán reflexiona: 

       "Una vez que haya terminado esta guerra también, todos volverán por donde llegaron. Aquí habrá crecido la hierba nueva, y de todo lo que sucedió aquí y de todo lo que padecimos ya no se verá nada y no parecerá real."

        Lamentablemente, mientras el ser humano no comience a valorar la vida y a respetar la vida ajena, las masacres continuarán.

        Y cualquiera sea el arma que utilicemos, sea una mandíbula con la que Caín le golpeó la cabeza a Abel, sea un dron, sea un arma nuclear, seguiremos viviendo en la Prehistoria.

        Aunque estemos en el siglo XXI.

Collage de una de las campañas en los alpes italianos,
de  Wikipedia 

Pueden ver la hermosa película en nuestro facebook de "Algo Especial Protagonista del Presente"
https://www.facebook.com/Algo-especial-protagonista-del-presente-124793278138776/

El frente italiano

En el marco de la Primera Guerra Mundial, el frente italiano hace referencia a una serie de batallas libradas entre los ejércitos de Austria-Hungría e Italia, junto con sus respectivos aliados, en el norte de Italia entre 1915 y 1918. Italia confiaba que uniéndose a los países de la Triple Entente contra las Potencias Centrales podría rescatar los territorios históricos italianos en manos de austríacos: el Tirol Cisalpino (actuales provincias de Trento y Bolzano), Istria, Dalmacia y el puerto de Trieste. Aunque Italia tenía la esperanza de comenzar la guerra con una ofensiva sorpresa destinada a actuar con rapidez y capturar varias ciudades austriacas, se empantanó en una guerra de trincheras similar a la frente occidental.
Fuente: Del sitio Wikipedia - Frente Italiano (Primera Guerra Mundial)https://es.m.wikipedia.org/wiki/Frente_Italiano_(Primera_Guerra_Mundial)