A Dios

por Francisco Rodríguez Zapata
No hay más que Tú; la tierra, el firmamento,
el sol, que en anchos mares reverbera,
son con el hombre y la creación entera
ráfagas fugitivas de tu aliento.

De la nada se alzaron a tu acento
mil mundos, publicando en su carrera
que otros mil y otros mil formar pudiera
una palabra tuya, un pensamiento.

Doquier contemplo tu insondable ciencia,
velada majestad y en amor puro,
dando esperanzas al mortal contrito.

Porque se que comprende tu existencia
lo que fué, lo presente, lo futuro,
y aún más allá, lo eterno, lo infinito.

Biografía de Francisco Rodríguez Zapata
Nació en la villa de Alanís, provincia de Sevilla, el 4 de octubre de 1813, en el seno de una familia acomodada, trasladándose muy joven con su madre a la capital andaluza.
Fue discípulo del celebro literato y matemático Alberto Lista, al cual profesó constantemente la mayor consideración y acendrado cariño. Estudió Rodríguez Zapata con fruto las humanidades y algunos idiomas, siguió la carrera eclesiástica y se ordenó de sacerdote en 1837, tomando el grado de doctor en Filosofía y Letras y Derecho Civil y Canónico ese mismo año cuando sus conocimientos eran muy vastos en cuanto había aprendido, sobre todo en la lengua de Cicerón y Horacio, y en poética, como lo demostraban sus poesías, que muy bien pueden figurar con las de Herrera, Gallego y las de su mismo maestro Lista, haciéndole insigne miembro de la llamada «escuela sevillana».

Apreciando su mérito literario, tras unas brillantes oposiciones celebradas ante el propio Gallego —presidente del tribunal— en Madrid (su única estancia en dicha villa), le nombró el gobierno catedrático de retórica y poética en la universidad de Sevilla en 1847, de la que era profesor desde 1835 nombrado por su claustro. Desde entonces se dedicó á la enseñanza, logrando con sus bellas dotes y suave carácter y erudición granjearse el cariño de todos sus alumnos y una envidiable fama entre sus compañeros.

Ha sido además prebendado de la colegial de Olivares, en recompensa muy inferior á la que sus merecimientos reclaman, siendo posteriormente capellán real de la de San Fernando de Sevilla en 1853 y elevado más adelante a canónigo de la metropolitana de Sevilla, y pertenece, por último, á varias academias, entre las que debe mencionarse la Real Academia Sevillana de Buenas Letras, que le cuenta entre sus más ilustrados individuos de mérito.

Fallece a los setenta y cinco años de edad, no quedando gran recuerdo de su obra poética, lo que se debió a que en vida huyera de la fama, no recopilando si quiera sus poesías, pues prefirió el afecto de su familia y discípulos.
Fuente de la biografía: Del sitio Sevillapedia - Francisco Rodríguez Zapata
https://sevillapedia.wikanda.es/wiki/Francisco_Rodr%C3%ADguez_Zapata

La imagen de portada pertenece a la acuarelista francesa Marie Claire Moudru, quien pertenece a la Sociedad Francesa de la Acuarela.
http://www.sfaquarelle.fr/?q=moudru

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